El Fantasma de Little Boy

6 de agosto de 1945. Fecha jamás olvidada al menos para los historiadores, pues el mundo no recuerda las palabras del copiloto del bombardero estadounidense B-29 desde donde se lanzó al "pequeño niño", quien al ver el horror del poder destructivo de ese artefacto bélico exclamó: "!Dios mío, qué hemos hecho!" o la versión quizá más factible y verdadera del comandante del Enola Gay: "!Dios mío, miren a esa hija de puta!", refiriéndose a la ciudad nipona inmersa en una sucursal del infierno.

"La usamos para acortar la agonía de la guerra, para salvar las vidas de miles y miles de jóvenes estadounidenses" fue la declaración de H. S. Truman.

¿Fue necesario matar a 144,000 personas para "salvar..."?
Ante la negativa de la rendición de los japoneses, según Truman, echó mano de tan aberrante decisión, amén de mandar un mensaje a la antigua URSS.

Hagamos un ejercicio mental.

Soy un ladrón que se introduce a tu casa dispuesto no sólo a robar sino hasta matar si fuere necesario, armado con pistola en mano y tal vez de ribete una arma blanca.

Fui descubierto por el propietario del inmueble transgredido y quien, apuntándome desde el descanso de un balcón, me advierte que no dé un paso más y que suelte las armas, apuntándome con una escopeta de doble cañón.

Ante la advertencia, no suelto las armas tal vez inclusive por falta de reacción por el sorpresivo "in fraganti".

El agredido no quiere matarme, pues sabe que tiene TODO el poder con esa arma, muy, extremadamente muy superior a las que porto.

¿Qué hace entonces?

DISPARA CONTRA LA PARED, como aviso de que jamás lo venceré con esa escopeta en sus manos.

Yo me cago en los calzones, suelto las armas y no doy pie a que el siguiente disparo se dirija contra mi humanidad. ¿O no?

Fin del ejercicio.

¿Truman no pudo haber hecho algo similar? o fue, como también consta en los anales de la historia, una venganza del ataque sorpresivo, vil y repugnante también a Pearl Harbor por parte de la aviación japonesa.

Lo importante del "remember" de este día, es que después de la guerra fría, comenzada en ese preciso año ante las abominables armas nucleares, hoy por hoy, esa "guerra fría" se ha convertido -como lo señalé en post diverso-, en "guerra criogénica" y en cualquier momento, ante las decenas de miles de bombas atómicas en posesión de cantidad de naciones y uno que otro loco como el mandamás de Corea del Norte, se vuelve el día a día, en una gran bendición si lo terminamos acostaditos y calientitos en cama (para quienes gozamos de ese privilegio).

Más aún cuando en el "fallido golpe de estado" en Turquía, desaparecieron como por arte de magia, todo un arsenal de misiles nucleares propiedad de los EUA en bases militares turcas. Si esos misiles están en manos de Yihadistas, oremos porque se les achicharre el dedo y hasta el culo, antes de que disparen esas terribles armas (más las ya, de avanzada tecnología de destrucción masiva).

Lo malo, es que no necesariamente en manos Yihadistas esos artefactos nucleares pueden darnos una sorpresa de día, de noche o de madrugada, pues el mundo está en franca y abierta guerra y ese fantasma de Little Boy, aún circunda el planeta entero.

Quien no lo vea así, con todo respeto...está ciego, o de plano atrapado en el mundo de Pokémon Go.