DEL AMERICAN DREAM AL ÁRABE- WARBUSINESS

¿No tienes trabajo? –!No te preocupes!, solucionamos todos tus problemas con un sueldo de $50,000 mensuales, más seguro de vida que incluye el estudio universitario de tus hijos, capacitación de primer mundo y equipo de trabajo ultramoderno. Y lo mejor…!sin tener que arriesgar tu trasero con los güeros!, ahora será con los árabes (Aplican condiciones. Nos reservamos el derecho de admisión)

Me parece ver anuncios en toda clase de “spots” con ese mensaje de redención económica para las millones de familias en México que quisieran salir huyendo de la miseria que las envuelve en el país del chile (que sólo aplica pa´ los jojidos) y las garnachas (que sólo aplica pa´los jodidos), pues resulta, que en la revuelta civil desatada en Yemen, los “príncipes” árabes que se bañan con petróleo (oooootra vez el pinche petróleo) y se secan con billetes verdes, auspiciados (oooooootra vez por los pinches mandamás gabachos) con la friolera de 1.2 mil millones de dólares, para, entre otras cosas, reclutar mercenarios para pelear por sus intereses.

Desde hace cinco años, entró un nuevo “producto” en el mercado mundial en la llamada “Aldea Global” que más parece “La Tribu Global” y cabe que pida disculpas para denominar así a uno de los aspectos más negros como consecuencia de la globalización, ya que las históricas tribus merecen un respeto como culturas en el mundo, pues aunque también estaban en la barbarie, no “exportaban” carne humana para sobrevivir en éste mundo cada vez más descompuesto.

Ahora se compra y vende sangre derramada. Perdón, pero no puedo dar otro nombre a los infames actos de los dueños del dinero y como consecuencia del poder en el mundo.

En esa revuelta civil, los hombres del turbante con esmeraldas, desde hace cinco años, han reclutado a excombatientes militares de Colombia básicamente, pero también de Chile, Panamá y El Salvador que se venden literalmente como mercenarios, término que no es nuevo, pues han existido también en muchas épocas de la historia del “homo sapiens” que cada vez parece menos hombre y mucho menos pensante.

Y, efectivamente sueldo y prestaciones son los antedichos, para luchar una guerra que no es suya y partir a un desconocido y recalcitrante lugar que los separa 13,000 kms de sus familias.

Desde el punto de vista ético, no es válido ni el comprador ni el que se vende. Sin embargo, sin tratar de justificar el asesinato, porque eso es cualquier guerra, por más “códigos” que le pongan, nunca ha dejado de ser el ASESINATO de hombres vs hombres, a los que se venden se les puede comprender. Cualquiera que sea padre (o madre), entenderán que hasta la vida misma se da por los hijos. Qué ironía, qué incongruencia, “dar la vida por mis hijos” dejando en la orfandad a otros.

Ese parece ser el futuro (que ya nos alcanzó), de las guerras…países ricos peleando guerras con hombres de países pobres. Y aún cuando no fuera así, no conozco ningún “final feliz” (nunca será feliz una guerra) en donde UN SOLO SOLDADO, haya recibido los “frutos” de ninguna guerra, salvo lo que en la barbarie, esos mismos hombres cometen y roban, violan, torturan y se convierten en una denigrante sombra de lo que alguna vez fue, sin regreso, pues ante los perversos hechos ya no hay regresos, salvo la Misericordia de Dios.

El hombre pelea siempre guerras ajenas, que ni siquiera van acompañadas de “patriotismo”, pues el patriota pelea mandado y comandado por quien no lo es. Cómo me gustaría ver, como en las épocas de los grandes imperios antiguos, luchar al frente a un Obama, a un Putin, a un Bassar, o cualquier otro mandatario, viviendo y conociendo los horrores de lo que ellos mismos provocan.

Pero en los tiempos modernos y “civilizados” no hay tal; tecnología y carne humana de cañón son las nuevas estrategias de guerra, llevando por todo el orbe la desgracia, el llanto de niños, mujeres y ancianos que ven no sólo la muerte (seguramente la gran mayoría de ellos quisieran morir junto a sus seres queridos), sino las vejaciones y traumas que permanecerán de por vida no solamente en su psiqué, sino tatuadas en el alma.

A veces me parece estar viviendo una terrible pesadilla y que cualquier día de éstos (o noche), despertaré y descubriré con alegría que el hombre sigue siendo hombre. Que nuestro mundo no está tan podrido, que con dificultades, pero el mundo aún tiene salvación.

PD. Recomiendo ver la magistral película, dirigida por Sean Penn, cuyo Soundtrack es producto de Eddie Veddery que lleva por título el mismo nombre en inglés (Into the wild) o "Hacia tierras salvajes" en español. No cabe duda, que existen muchas estrellas de la música, que en sus líricas expresan los sentimientos más profundos y loables de muchísimos hombres de buena voluntad que aún existen en el mundo (afortunadamente), como una síntesis de libros enteros de filosofía.

Hombres que luchan, pero no unos contra otros, pelean contra el mal mismo imperante en nuestros días.